Cuando llega el momento más difícil, lo único que deseas es tenerlo todo resuelto.
Hablar de la muerte incómoda, sobre todo cuando estás lejos de casa. Y, sin embargo, quienes emigran suelen cargar con la doble responsabilidad de salir adelante por su familia… y también de responder en los momentos más duros.
¿Qué pasaría si tú o un ser querido fallece en España? Nadie quiere imaginarlo, pero ignorarlo no lo evita.
Lo que pocos saben es que repatriar un cuerpo desde España a Colombia puede costar entre 6.000 y 10.000 euros, una cifra que no todos tienen a la mano, especialmente en medio del duelo.
Cuando ocurre lo impensado, comienza una pesadilla logística y financiera: trámites, permisos, papeles, recaudaciones por redes sociales y dolor multiplicado.
Historias como la de Luis, quien murió inesperadamente en Valencia y su familia en Cali tardó semanas en poder reunir el dinero para traerlo, son más comunes de lo que imaginas.
Por eso existe un seguro que casi nadie quiere pensar en contratar, pero que todos terminan necesitando.
El seguro de repatriación cubre el traslado del cuerpo desde España hasta Colombia e incluye todo lo necesario: ataúd, embalsamamiento, cremación si se requiere, carroza fúnebre, flores, lote, velación y acompañamiento completo durante el proceso.
Lo contratas hoy, lo olvidas, y cuando más lo necesitas… está ahí.
Y lo mejor: se puede pagar desde España sin complicaciones, por un costo mínimo en comparación con una repatriación.
Porque la dignidad de volver a casa no debería depender de una colecta. Porque tus seres queridos merecen llorarte en paz, no correr de oficina en oficina mientras hacen rifas para poder enterrarte.
Este seguro no es por ti, es por los que se quedan.
Es por amor, por previsión y por dejar las cosas en orden.
Hoy puedes tomar una decisión que lo cambiaría todo mañana.
